Las personas con discapacidad y sus derechos como consumidoras

La Ley Federal de Protección al Consumidor protege y promueve los derechos y la cultura del consumidor. Además, ésta promueve igualdad, certeza y seguridad jurídica en las relaciones entre quienes proveen bienes y servicios y quienes los consumen.

A partir de este marco normativo se pueden identificar siete derechos básicos de las personas consumidoras a los que también deben tener acceso las personas con discapacidad.

Información y consumo

Las personas con discapacidad deben contar con información sobre bienes y servicios que sea oportuna, veraz, completa, clara y universalmente accesible y comprensible, a través de recursos como la escritura Braille, la interpretación de Lengua de Señas Mexicana, el subtitulaje electrónico y las versiones en lectura fácil, entre otros.

Educación y consumo

Las personas con discapacidad deben contar con información accesible sobre sus derechos como consumidoras, para realizar elecciones de manera libre y autónoma, evaluando sus necesidades y la oferta del mercado, sobre todo cuando estos bienes y servicios se refieren a apoyos técnicos o tecnológicos que les permiten mejorar su autonomía e independencia, y su calidad de vida.

Libertad de elección y consumo

Las personas con discapacidad deben poder elegir los bienes o servicios que consumirán de manera voluntaria, sin coerciones, presiones o la exigencia de pagos que no estén previstos y contar con información sencilla, clara y accesible sobre las implicaciones del acceso a estos bienes o servicios, que les permita evaluar sus necesidades de manera libre y expresar su voluntad por si mismas o mediante los apoyos que decidan.

Calidad, seguridad y consumo

Las personas con discapacidad deben poder acceder a bienes y servicios adecuados a sus necesidades, seguros, resistentes, durables y que resulten armónicos con la diversidad de características funcionales de quienes los usan.

No discriminación y consumo

Las personas deben poder acceder a los bienes y servicios de manera sencilla, sin restricciones, impedimentos o condicionamientos relacionados con el género, la orientación sexual, la edad, la religión, la discapacidad, la cultura, las opiniones políticas, ser persona indígena o afro, la condición socioeconómica o la estructura familiar, entre otros previstos en el marco normativo.

Compensación a la persona consumidora

En caso de que se les otorgue un producto de mala calidad o un servicio inadecuado, las personas pueden decidir de manera libre y autónoma sobre la compensación que desean recibir, ya sea devolviéndoles el dinero, reponiendo el producto o recibiendo una bonificación proporcional.

Protección de la persona consumidora

Cuando las personas sientan que sus derechos como consumidoras no han sido respetados, ellas pueden exigirlos a través de instancias como PROFECO, cuyos servicios se prestan con absoluto respeto a su dignidad y libres de discriminaciones.